Este domingo, en Chile, más de 15 millones de ciudadanos votan de forma obligatoria en un plebiscito constitucional para decidir el futuro de la propuesta de nueva Constitución, elaborada esta vez por el Consejo Constitucional, cargado hacia la derecha, siendo el Partido Republicano el de mayor representación.
Se trata del segundo intento del país vecino para rehacer la Carta Fundamental, tras el fracaso del texto de la Convención Constitucional, que fue rechazado enfáticamente en septiembre de 2022.
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El proceso enfrenta dos opciones: la primera, que es "en favor" y aprueba la entrada en vigencia del documento, y la segunda, que es "en contra" y desestima la iniciativa y mantiene la Constitución de 1980 con sus múltiples reformas aplicadas.
Se informó que el gobierno de Gabriel Boric apoyó con fuerza el primer proyecto de Constitución, sin embargo, se mantiene al margen del segundo.
De triunfar la alternativa "en favor", la derecha chilena será la gran ganadora, pues impondrá una nueva Constitución.
