La inteligencia artificial (IA) es un campo de la ciencia relacionado con la creación de computadoras y máquinas que pueden razonar, aprender y actuar de una forma que normalmente requeriría la inteligencia humana, además de involucrar datos cuya escala exceden lo que las personas pueden analizar.
En términos netamente económicos, las personas pueden mejorar su eficiencia, productividad y toma de decisiones con la aplicación de la IA. Josué Álvarez, director del Centro de Investigación en Economía y Políticas Sociales de la Universidad San Ignacio de Loyola (USIL), profundizó en este punto durante la última edición del programa ‘Consejo Económico‘.
Álvarez indicó que en la red se puede hallar información que, “de repente, muchos no pueden procesarla con bastante facilidad”; no obstante, mencionó que existen beneficiosas aplicaciones con IA.
“La IA puede ayudar mucho, pues existen aplicaciones donde se puede colocar, por ejemplo, los ingresos de uno. También se puede ir dando información sobre el presupuesto. La IA te puede ir sugiriendo, alertando o proponiendo. Hay algunas que te permiten ahorrar, que son predictivas o que te sugieren invertir, de repente en bonos u otro tipos de activos”, sostuvo en diálogo con el periodista Augusto Thorndike.
El experto puntualizó que, si bien la información que hay en internet “trata de ser más completa”, el análisis es “propio del investigador”.
“Cada vez, la información intenta ser más completa. Estamos contando con muchos datos y se está demostrando que la IA contribuye a las sociedades; inclusive, el Banco Mundial reporta que la IA puede ayudar a que los puestos laborales incrementen su productividad entre el 8 y 14 % en América Latina y el Caribe”, refirió Álvarez, quien anotó: “Podemos usar la IA para la búsqueda de información, pero el análisis debe ser muy propio del investigador”.