La repentina muerte del congresista Hernando Guerra García ha desatado una ola de críticas hacia el sector salud en Perú, más aún cuando se conoció que la posta médica Punta de Bombón (Arequipa), donde debió atenderse el integrante de la bancada de Fuerza Popular, se encontraba cerrada, puesto que solo opera doce horas.
Pero, ¿hay responsables en el deceso del popular 'Nano'? De acuerdo con el analista político Jaime de Althaus, el exgobernador de Arequipa, Elmer Cáceres Llica, decidió, por razones ideológicas, no renovar un convenio suscrito entre la compañía Southern y su predecesora Yamila Osorio dos gestiones atrás, que permitía la operatividad de centros de salud.
Esto lo señaló en diálogo con Willax.pe, que lo contactó para conocer su postura sobre si la regionalización ha fracasado en el país.
"Esta es una información de Carlos Aranda, quien fue funcionario de Southern. Él firmó un convenio con el gobierno regional de Arequipa, que en ese momento era presidido por Yamila Osorio, para dar atención las 24 horas del día en todos los centros de salud de la provincia de Islay, en los distritos de Cocachacra, Punta de Bombón e, incluso, en Mollendo. Según la información que se me dio, los antimineros se opusieron, o sea, que allí no se concretó el convenio, pero en los demás distritos sí. Entonces, Southern pagó médicos y asistentes para 24 horas en centros de salud, habiendo atenciones a domicilio", declaró.
De Althaus indicó que el servicio fue "exitoso" hasta la llegada de Elmer Cáceres Llica, "un hombre radical de izquierda que no quiso renovar el convenio, por lo que Southern desmontó el servicio".
Así, la figura del antiminero se presenta como uno de los responsables en la muerte de Guerra García, que sufrió una descompensación.
"(Elmer Cáceres) tiene ideología antiminera. Para ellos, los anticapitalistas, las empresas como Southern son enemigas del pueblo. Están en contra del proyecto Tía María, que ha demostrado que no afectará el medioambiente. Lo que prima en ellos es la mitología antiminera para engañar a la gente y mantener sus posiciones de poder", sostuvo.
"Cáceres, en cierto sentido, es responsable, porque si no hubiese suprimido el convenio, el congresista hubiese sido atendido con tiempo", remarcó.
¿LA REGIONALIZACIÓN ES UN FRACASO?
Al saber que la salud está en manos de los gobiernos regionales, el también periodista consideró que el proceso de regionalización es uno "fallido".
"De hecho, ha fracasado. No funciona bien. Se hizo mal convirtiendo los departamentos en regiones, las cuales deberían ser más grandes. Luego, se transfirieron muchas funciones sin que las regiones estuvieran preparadas. Las competencias están mal distribuidas, pero lo que sí se transfirió son recursos para obras", mencionó.
"En este momento, las regiones y gobiernos locales ejecutan casi el 70 % de la obra pública. Eso sí, se ha descentralizado fortísimamente, porque antes de que existieran las regiones, los gobiernos locales ejecutaban el 2 o 3 % de la obra pública, y ahora ejecutan casi el 70 %, que es un montón de dinero, proveniente del desarrollo del país. Y así los gobiernos locales y regionales se convierten en botines presupuestales, ello si se le suma la descomposición y ausencia de los partidos políticos, que produjo que se formaran movimientos regionales, muchas veces integrados por gente mafiosa que quiere capturar el dinero del Estado", acotó.
¿QUÉ PLANTEA JAIME DE ALTHAUS?
De Althaus puntualizó que es partidario de lo propuesto por Fernando Cilloniz, el exgobernador regional de Ica que sugiere "crear autoridades constitucionalmente autónomas y profesionalizadas para manejar el agua potable".
"Para mí, el manejo del agua potable es un desastre, pues está en mano de las municipalidades. La gestión es pésima. También la salud, educación e infraestructura", concluyó.
