Los pasajeros del vuelo 1915 de American Airlines con destino a Dallas (Estados Unidos) vivieron momentos de terror cuando uno de los pasajeros intentó abrir una de las puertas del avión en pleno viaje.
La rápida intervención de la tripulación y otros viajeros lograron contener la situación, evitando así un desenlace catastrófico, reportó ABC News. Este incidente se produjo el martes 19 de noviembre.
Este hecho ocurrió cuando un ciudadano canadiense se acercó a un asistente de vuelo y le pidió que le abriera la puerta de la cabina mientras estaban volando a miles de metros de altura.
Evidentemente, su petición fue denegada, por lo que el sujeto corrió hacia la puerta, golpeando al asistente de vuelo que la estaba bloqueando, según el informe emitido por el Departamento de Seguridad Pública del Aeropuerto Internacional de Dallas Fort Worth.
Acto seguido, algunos usuarios fueron ayudar al asistente e intentaron controlar al pasajero descontrolado que pedía abandonar el avión. En ese momento, otro asistente de vuelo les entregó a los pasajeros una cinta adhesiva para así inmovilizar al sujeto.
Tras vendarle las muñecas y los tobillos, lo acostaron boca abajo durante el resto del vuelo. Finalmente, el vuelo pudo arribar a su destino sin mayores problemas.
En declaración con ABC News, Doug McCright, uno de los pasajeros que sometió al hombre, declaró: "Él estaba yendo hacia la puerta, así que lo agarré por detrás y le impedí que tirara de la puerta".
Ya en tierra, la policía del aeropuerto y el FBI se llevaron al hombre, aunque formalmente no ha sido detenido. No obstante, se informó que la investigación sobre su conducta está en curso.
COMUNICADO DE AMERICAN AIRLINES
American Airlines emitió un comunicado agradeciendo a su equipo y a los pasajeros por su manejo de una situación desafiante.
"La seguridad y el bienestar de nuestros clientes y empleados son nuestra máxima prioridad", expresó la compañía, sin ofrecer más detalles sobre el pasajero implicado ni los procedimientos específicos adoptados durante el incidente.
Por su parte, la Administración Federal de Aviación (FAA) confirmó que está llevando a cabo una investigación para determinar las causas y circunstancias del evento, evaluando si hubo fallas en los protocolos de seguridad o la respuesta operativa a bordo.
Mientras tanto, las autoridades del aeropuerto de Dallas-Fort Worth y la tripulación del vuelo cooperan plenamente con las investigaciones, proporcionando informes y registros del incidente.