Luis Sánchez Aranda, uno de los dueños de la cevichería “Mi Barrunto”, es investigado por la Primera Fiscalía Supraprovincial Corporativa Especializada en delitos de Lavado de activos, por el presunto liderazgo de la organización criminal del ‘Clan familiar Sánchez Aranda’.
Vale precisar que Aranda tiene una colección de autos de alta gama, inmuebles que superan los 2 millones y medio de soles.
“En el restaurante “Mi Barrunto” de propiedad de los Sánchez Aranda, se estarían concertando reuniones a fin de efectuar el delito de tráfico de ilícito de drogas“, se lee en la carpeta fiscal.
Según la Fiscalía, encontró que entre el 2014 y el 2017 hubo depósitos por 12 millones de soles desde Panamá a las cuentas bancarias de los hermanos Sánchez Aranda sin poder justificar su procedencia. Es más, que realizaron operaciones para ocultar el origen ilícito de ese dinero que, según la Fiscalía, sería del tráfico de drogas.
MI BARRUNTO Y SU CERCANÍA CON HURTADO
Pero, fue su cercanía a Andrés Hurtado que lo expuso a aún más, la compra y posterior reventa del Porsche Cayenne por 30 mil dólares al mismo precio a la empresa AH Entertainment Company, empresa del conductor de televisión.
La opulenta vida de Luis Sánchez Aranda lo llevó al punto de no pasar inadvertido para el despacho de lavado de activos. El reloj Rolex que usa su esposa está valorizado en 17, 500 dólares. Asimismo, el anillo de compromiso que le compró a su entonces novio costó 30 mil dólares.