Juan Carlos Villena, el fiscal de la impunidad: conozca el indignante pasado del titular del Ministerio Público

¡Exclusivo! Juan Carlos Villena, el fiscal de la impunidad. Conozca el indignante pasado del ahora máximo representante del Ministerio Público, el órgano independiente que persigue el delito.

'ContraCorriente' viajó hasta Chincha, centro de labores por años del magistrado Villena, convertido en fiscal de la Nación interino. Allí, un hombre parapléjico lo recordará amargamente de por vida como el fiscal que abandona, que claudica sus funciones, que no persigue el delito y que propicia la injusticia.

El citado dominical pidió una entrevista formal con Villena, pero el área de imagen del Ministerio Público nunca confirmó nada. El fiscal, supuestamente amenazado por Gustavo Gorriti, según chats del ex asesor Jaime Villanueva, tampoco respondió sobre un proceso judicial que lo favoreció y del cual un juez, cercano como se ve en una foto, poco quiere hablar.

¿Quién es Juan Carlos Villena Campana? ¿Qué sombras cubren su pasado profesional y personal? ¿Qué aguas turbias sumergen su presente?

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En diciembre de 2023, 'ContraCorriente' publicó este chat de Jaime Villanueva, exasesor de la suspendida fiscal de la Nación, Patricia Benavides. La conversación la sostiene con la congresista apodada 'agente Roberto'. En dos líneas, Villanueva delata al ahora titular del Ministerio Público. 

Pero su nombre y apellido, sin embargo, no solo aparece en un chat del exasesor Villanueva. 'ContraCorriente' también difundió en febrero último un audio entre el 'hermanito' César Hinostroza Pariachi y su secretaria. Se coordinaba una reunión.

El presente del fiscal de la Nación amenazado es tan controversial como su pasado. El equipo periodístico de 'CC' viajó al sur chico de Lima. A pocas horas de la capital, la región Ica fue la sede de funciones por más de 20 años Villena. Entre enero de 2013 hasta junio de 202,2 laboró como fiscal superior titular de la Primera Fiscalía Superior Penal de Chincha. En estas tierras, una familia conoce al máximo representante del Ministerio Público como el fiscal de la impunidad.

En esta familia, figura Óscar Solari, quien quedó parapléjico tras ser baleado en una discoteca en Chincha en el 2013. Fue un caso sonado en esta provincia. Hoy, casi 11 años después, su búsqueda de justicia se ha extinguido en gran parte por responsabilidad de Juan Carlos Villena.

El hombre que descargó el arma fue Lirs Abregú Anampa. Después del hecho, Abregú fugó hacia los Estados Unidos. Tres años después, fue extraditado. Increíblemente, pese a que dejó parapléjico a su víctima, un juzgado lo absolvió. La familia Solari y el fiscal provincial a cargo del caso apelaron y el gatillero fue a prisión, pero con una pena que más parecía un premio: solo 6 años de cárcel. Totalmente desproporcional al daño causado, a decir de la familia.

Acto seguido, se decidió apelar. Fue en aquella apelación que el hoy fiscal de la Nación asume el caso, es decir, recibe la apelación formulada por un fiscal provincial, y Villena, por entonces fiscal superior titular, tenía que defenderla, acusar y perseguir el delito que ha dejado postrado de por vida al abogado. ¿Qué ocurrió? Lo que algunos malos fiscales hacen: ser blandos con los delincuentes y, en el peor de los casos, hasta liberarlos.

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Villena desistió, es decir, persistió con la acusación, no persiguió el delito, y la sala no tuvo nada más que juzgar. Hoy, por esa benigna pena, como señala la familia, el atacante se encuentra en libertad, mientras que su víctima inmóvil hace 11 años y sin justicia.

La historia se repite en otro caso. Giovanna Rebatta, candidata a la alcaldía de Chincha, denunció por chantaje a un periodista en 2018. Presuntamente, le pidió dinero a cambio no publicar información contra ella. La entonces candidata alertó a la policía y capturaron al comunicador en flagrancia. Sin embargo, luego fue absuelto. Un fiscal apeló y esa apelación cayó en manos del hoy Fiscal de la Nación. Él, otra vez, se desistió.

El fiscal de la Nación le jala la alfombra a su propia institución y desiste de acusar cuando hay un proceso ajeno, pero cuando se trata de él, de sus procesos judiciales, lucha hasta el final, y según nuestras fuentes, saldría ganador con la fuerza de sus influencias.