No eran extraterrestres: mineros ilegales extranjeros se disfrazaron para asustar a tribu en Loreto

Las supuestas apariciones de ‘seres extraños’ o ‘extraterrestres’ en el distrito de Alto Nanay, ciudad de Iquitos, empezaron a esclarecerse gracias a la investigación de la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental de Loreto.

El Ministerio Público explicó que detrás de las ‘apariciones’ estarían miembros de mafias extranjeras de mineros ilegales, conformadas por brasileños y colombianos, dedicadas a la extracción clandestina de oro.

Tras esta información, las autoridades pidieron a los pobladores de la comunidad de San Antonio de Pintuyacu de la tribu Ikitu mantener la calma y la compostura. 

En conversación con RPP, el fiscal Carlos Castro Quintanilla rechazó que lo visto por los integrantes de la tribu tenga algo que ver con seres de otro mundo, como se ha estado especulando fuertemente en las últimas semanas.

Sucede que los mineros ilegales estarían utilizando trajes, tecnología moderna y tácticas de intimidación para que la tribu Ikitu abandone su territorio.

Castro Quintanilla comentó que el 80% de los yacimientos de mineros ilegales, equipados para la extracción de oro, están justamente ubicados en la cuenca del río Nanay, por lo que se tiene la sospecha fuerte de que estas personas buscarían generar miedo entre los pobladores.

DENUNCIA

Como se recuerda, Jairo Reátegui Dávila, junto a otros miembros del pueblo indígena, denunció que los individuos que los atormentan visten de color negro, ‘miden dos metros’, son ‘inmunes’ a las armas y ‘desaparecen’ al ser acorralados.

“Son extraterrestres estos señores. Parecen blindados, tipo el duende verde de El Hombre Araña. Yo lo he baleado dos veces y no cae, sino que se eleva y desaparece. Estamos atemorizados por lo que está pasando en la comunidad. Su color es plateado, sus zapatos son de forma redonda y con eso se elevan. Andan flotando a un metro de altura y tienen una luz roja en la parte del talón. Su cabeza es larga, su máscara es larga y sus ojos son medio amarillento”, fue el relato del líder de la comunidad afectada.