Alberto Fernández, el único presidente en la historia que no pudo recibir a un equipo campeón del mundo

Alberto Fernández, presidente de Argentina, anhelo tener una foto con Lionel Messi y coger la Copa del Mundo. Sin embargo, todo solo quedó en deseo. 

El mandatario no tuvo la dicha de recibir a los ganadores del Mundial Qatar 2022, pues solo pudo ver la caravana realizada por el combinado 'Albiceleste' para festejar con los millones de hinchas, desde Olivos (residencia oficial del Presidente de la Nación Argentina), pues las negociaciones entre su gobierno y la  Asociación del Fútbol Argentino (AFA) no tuvieron un final feliz. 

Desde temprano, en la Casa Rosada, habían desplegado preparativos para recibir al seleccionado capitaneado por Lionel Messi. Sin embargo, apenas la caravana inició su recorrido, la AFA anunció que los jugadores saludarían a la gente desde la autopista 25 de mayo y 9 de Julio, sin bajar al microcentro.

El alto nivel de improvisación conspiró contra ese plan. Hasta que finalmente el titular de AFA, Claudio “Chiqui” Tapia, reveló los desacuerdos: "No nos dejan llegar a saludar a toda la gente”. La cápsula que acompañaba al plantel estaba en manos de la Policía Federal, que depende de Nación.

Alberto Fernández tiene, desde hace tiempo, una relación muy tirante con el presidente de AFA. El año pasado, Tapia atravesó un momento convulsionado cuando la Inspección General de Justicia (IGJ) investigó una denuncia que pedía impugnar la asamblea por la cual “Chiqui” había proclamado su reelección en mayo de 2020. 

En ese momento, en la Casa Rosada creían que el titular de AFA tenía el boleto picado. Y hubo movimientos que se interpretaron como un impulso a otros dirigentes del fútbol para ocupar la silla de Tapia. Entre ellos, el titular de Defensores de Belgrano, Marcelo Achile, prosecretario en AFA y muy cercano a Fernández. 

Por esta tensión y desacuerdos dirigenciales, Fernández no tuvo la misma suerte del exdictador Jorge Rafael Videla se encargó directamente de entregarle la copa al capitán Daniel Pasarella en 1978. Así como, Raúl Alfonsín abrió las puertas de la Casa Rosada en 1986 para que el conjunto liderado por Diego Armando Maradona.  Desde que se disputa el Mundial de fútbol organizado por la FIFA, las máximas autoridades de los países han recibido a los equipos campeones para agasajarlos, menos el presidente argentino.